Lo que comenzó siendo un pequeño sótano en Detroit terminó convirtiéndose en el espacio donde muchos artistas pudieron encontrar su voz dentro de la industria musical estadounidense.
Un 28 de noviembre pero de 1929 nacía Berry Gordy, un hombre que intentó comenzar una carrera de boxeo de peso pluma, formó parte del ejército de Estados Unidos a principios de la década de 1950 y quien fue incluido en el Salón de la Fama del Rock and Roll en 1988. Pero, ¿por qué recibió esta increíble coronación en el mundo de la música?
Gordy era un apasionado de la música, y ya conocía gran parte de la escena musical negra de Detroit, su ciudad natal. Además, había descubierto a un talentoso cantante llamado Williams Robinson Jr., mejor conocido como Smokey Robinson. Por esos motivos, en 1959 usó un préstamo de 800 dólares por parte de su familia para alquilar un sótano donde instaló su estudio musical.
Lo que no sabía Gordy fue que aquella humilde compañía se convertiría en un monstruo musical que terminó transformando el sonido de la música estadounidense y del mundo por las décadas siguientes. Lo que primero se llamó Tamla se reconvirtió en Motown Records, debido a la posición de Detroit dentro de la industria automovilística.
Ahora bien, la tarea de integrar al talento afroamericano a la industria norteamericana era todo un desafío, por lo cual el dueño del sello decidió mantener un mensaje a todos aquellos que lo integrasen: Keep It Simple, Stupid (Házlo fácil, estúpido), o KISS. Esto significaba que los artistas debían fabricar canciones para el oído del estadounidense promedio, que sea bailable, pegadiza y que se camufle entre el producto blanco.
La tarea fue exitosamente completada. En 1961, The Marvelettes conquistó al mercado musical con ‘Please Mr. Postman‘, alcanzando así los primeros puestos de las listas de éxitos. A esa se le sumaron títulos como ‘Baby Love’, de The Supremes, o ‘My Girl’ y ‘Papa was a Rolling Stone’, de The Temptations.
De todas formas, en todo el mundo se distingue hoy el “sonido Motown”, caracterizado por su simpleza y por el soul. “Tener un éxito híbrido durante esa época significaba que el público blanco compraría tus discos”, recuerda Robinson, quien estuvo presente al comienzo del sello discográfico. “El concepto de Berry al lanzar Motown fue grabar música con ritmos vibrantes y buenas historias para lograr tener éxitos que se consideraran música pop”, agregó.
Muchas carreras despegaron gracias a Motown Records, que tras obtener un éxito considerable abandonó la sede de Detroit en 1972 para asentarse en Los Ángeles, donde permaneció como compañía independiente hasta el 28 de junio de 1988. Fue allí cuando Gordy vendió la empresa a MCA y Boston Ventures, que tomó el control total en 1991.
Pero si vamos a hablar de Motown no podemos no mencionar a The Jackson 5, una de las bandas más populares entre las décadas de 1960 y 1970, que contaba con un importante nombre en esa formación. De hecho, era el más chico de todos: Michael Jackson dio sus primeros pasos en el sello de Gordy para luego lanzarse como solista. El artista no solo cambió la historia de la música con sus memorables canciones, sino que también marcó un estilo, con bailes, performances, videoclips y estéticas que estaban adelantados a su época.
Fuente: Ámbito